Abre un centro de prevención y atención integral a víctimas de violencia en Haití
Un espacio seguro para las mujeres y niñas de Bainet
Abre sus puertas en Bainet (Haití) el centro “El soplo de Fédia por la Dignidad”, financiado por la AECID, que ofrece atención y acompañamiento a mujeres y niñas supervivientes de violencia de género

Con un emotivo discurso, la coordinadora de la ONG Fanm Deside (Mujeres Decididas), Marie Ange Noël, inauguraba el 24 de noviembre en Bainet (Haití) el centro Souf Fédia Pou DIYITE (El soplo de Fédia por la Dignidad):
“Hoy no estamos solo en un edificio, sino en un refugio: una mano tendida a las mujeres y niñas para permitirles respirar un nuevo soplo. La apertura de Souf Fédia Pou Diyite representa un compromiso firme: no dejar que ninguna mujer ni ninguna niña sola frente a las violencias que sufre”.
Este Espacio Seguro, financiado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), ofrecerá refugio a las mujeres y niñas de Bainet, además de servicios de recepción y escucha activa, apoyo psicosocial y protección de emergencia de primer nivel con derivación a servicios médicos, legales y policiales, según los protocolos de la política haitiana de violencia de género.
En el centro habrá también actividades comunitarias orientadas a la prevención de la violencia de género y a la promoción de los derechos de las mujeres. Ello será posible gracias a una red de 120 mujeres formadas y a los comités locales de protección creados por el proyecto.
LA COOPERACIÓN ESPAÑOLA DONDE MÁS SE NECESITA
Bainet es un municipio rural enclavado del Sudeste de Haití con más de 100.000 habitantes con infraestructura básica insuficiente en agua potable, electricidad y carreteras, con alto desempleo juvenil y elevada vulnerabilidad climática. Es, además, una de las comunas más afectadas por la violencia de género, según investigaciones de la fiscalía de Jacmel.
En 2025, un estudio financiado por la AECID en Bainet, uno de los 10 municipios de este departamento, revela hasta 352 casos de violencia de género solo en cinco secciones comunales de las 9 con que cuenta el municipio. En el 80% de estos casos las víctimas son mujeres y niñas.
CAPACITACIÓN DE MUJERES “CATALIZADORAS” DE LA COMUNIDAD
Las altas tasas de pobreza, las normas socioculturales, la inestabilidad, la inseguridad, la impunidad y la falta de servicios básicos y especializados son factores que acentúan la violencia contra las mujeres y perpetúan la vulnerabilidad para las niñas en Haití.
Con esta expresión “Se Batay Fanm kap Chanje Kondisyon Fanm“ (la lucha de las mujeres transformará la condición de las mujeres) finalizaba la responsable de la ONG Fanm Deside su discurso de inauguración. En un contexto rural en el que las redes de protección son inexistentes, se hace necesario alentar a las propias comunidades para que se organicen.
Para garantizar la sostenibilidad de las actividades de prevención y lucha contra la violencia de género fueron formadas 120 mujeres de distintas secciones comunales. Dichas mujeres se convertirán en palanca de transformación social sirviendo como puente entre la comunidad y los servicios de atención a las víctimas; facilitando los servicios del espacio seguro, o ayudando en la derivación a otros servicios de protección y salud.
FÉDIA LAGARRE DE BAINET, CANTANTE Y ACTIVISTA POR LOS DERECHOS DE LAS MUJERES
Fédia Laguerre, a quien se dedica el centro, es una conocida cantante haitiana originaria de este municipio, y también una activista comprometida. Participó activamente en una histórica marcha que el 3 de abril de 1986 reunió a decenas de miles de mujeres en las calles de Haití para reclamar sus derechos tras la caída de la dictadura Duvalier, que marcó el inicio de una nueva fase del feminismo haitiano.
Su compromiso también se refleja en algunas de sus obras, especialmente "Operación Dechoukaj" (1986), que forma parte de la movilización popular para el cambio social y político en Haití. Fédia Laguerre es citada entre las figuras que contribuyeron a este movimiento junto a activistas e intelectuales como Marie Laurence, Jocelyn Lassègue, Danielle Magloire, Nicole Magloire, Carole Démesmin, Anne Marie Coriolan, Myriam Merlet y Magalie Marcelin.
Un espacio seguro para las mujeres y niñas de Bainet
Abre sus puertas en Bainet (Haití) el centro “El soplo de Fédia por la Dignidad”, financiado por la AECID, que ofrece atención y acompañamiento a mujeres y niñas supervivientes de violencia de género

Con un emotivo discurso, la coordinadora de la ONG Fanm Deside (Mujeres Decididas), Marie Ange Noël, inauguraba el 24 de noviembre en Bainet (Haití) el centro Souf Fédia Pou DIYITE (El soplo de Fédia por la Dignidad):
“Hoy no estamos solo en un edificio, sino en un refugio: una mano tendida a las mujeres y niñas para permitirles respirar un nuevo soplo. La apertura de Souf Fédia Pou Diyite representa un compromiso firme: no dejar que ninguna mujer ni ninguna niña sola frente a las violencias que sufre”.
Este Espacio Seguro, financiado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), ofrecerá refugio a las mujeres y niñas de Bainet, además de servicios de recepción y escucha activa, apoyo psicosocial y protección de emergencia de primer nivel con derivación a servicios médicos, legales y policiales, según los protocolos de la política haitiana de violencia de género.
En el centro habrá también actividades comunitarias orientadas a la prevención de la violencia de género y a la promoción de los derechos de las mujeres. Ello será posible gracias a una red de 120 mujeres formadas y a los comités locales de protección creados por el proyecto.
LA COOPERACIÓN ESPAÑOLA DONDE MÁS SE NECESITA
Bainet es un municipio rural enclavado del Sudeste de Haití con más de 100.000 habitantes con infraestructura básica insuficiente en agua potable, electricidad y carreteras, con alto desempleo juvenil y elevada vulnerabilidad climática. Es, además, una de las comunas más afectadas por la violencia de género, según investigaciones de la fiscalía de Jacmel.
En 2025, un estudio financiado por la AECID en Bainet, uno de los 10 municipios de este departamento, revela hasta 352 casos de violencia de género solo en cinco secciones comunales de las 9 con que cuenta el municipio. En el 80% de estos casos las víctimas son mujeres y niñas.
CAPACITACIÓN DE MUJERES “CATALIZADORAS” DE LA COMUNIDAD
Las altas tasas de pobreza, las normas socioculturales, la inestabilidad, la inseguridad, la impunidad y la falta de servicios básicos y especializados son factores que acentúan la violencia contra las mujeres y perpetúan la vulnerabilidad para las niñas en Haití.
Con esta expresión “Se Batay Fanm kap Chanje Kondisyon Fanm“ (la lucha de las mujeres transformará la condición de las mujeres) finalizaba la responsable de la ONG Fanm Deside su discurso de inauguración. En un contexto rural en el que las redes de protección son inexistentes, se hace necesario alentar a las propias comunidades para que se organicen.
Para garantizar la sostenibilidad de las actividades de prevención y lucha contra la violencia de género fueron formadas 120 mujeres de distintas secciones comunales. Dichas mujeres se convertirán en palanca de transformación social sirviendo como puente entre la comunidad y los servicios de atención a las víctimas; facilitando los servicios del espacio seguro, o ayudando en la derivación a otros servicios de protección y salud.
FÉDIA LAGARRE DE BAINET, CANTANTE Y ACTIVISTA POR LOS DERECHOS DE LAS MUJERES
Fédia Laguerre, a quien se dedica el centro, es una conocida cantante haitiana originaria de este municipio, y también una activista comprometida. Participó activamente en una histórica marcha que el 3 de abril de 1986 reunió a decenas de miles de mujeres en las calles de Haití para reclamar sus derechos tras la caída de la dictadura Duvalier, que marcó el inicio de una nueva fase del feminismo haitiano.
Su compromiso también se refleja en algunas de sus obras, especialmente "Operación Dechoukaj" (1986), que forma parte de la movilización popular para el cambio social y político en Haití. Fédia Laguerre es citada entre las figuras que contribuyeron a este movimiento junto a activistas e intelectuales como Marie Laurence, Jocelyn Lassègue, Danielle Magloire, Nicole Magloire, Carole Démesmin, Anne Marie Coriolan, Myriam Merlet y Magalie Marcelin.


